En consecuencia con las tareas de conservación y cuidado que se realizan en la Reserva Natural Municipal de Lomas de Zamora, dos vecinos de Lanús se comunicaron con la Secretaría de Medio Ambiente del Municipio lomense y entregaron una lechuza vizcachera en muy buen estado sanitario para que la misma regrese a un hábitat natural, rodeada de un ecosistema amigable.
Zulma Cataña y Julio Socolovski, vecinos de Lanús que encontraron una lechuza de las Vizcacheras -también llamada “de campo”- en estado de abandono en un depósito, no dudaron en confiar ante la cercanía y conocimiento de las actividades realizadas por el municipio en ese sentido.
A diferencia de la mayoría de las lechuzas, esta especie tiene hábitos diurnos, lo que la hace más conocida por la gente. Se encuentra en paisajes abiertos, tales como pastizales, áreas agrícolas, desiertos o cualquier otra área seca libre de vegetación baja, por lo que la Reserva Municipal es un ámbito ideal para su liberación.
Son carnívoras, de modo que los insectos, pequeños reptiles e incluso aves pueden servirle de alimento. Al igual que otras lechuzas, han sido perseguidas desde tiempos remotos debido a supersticiones, a pesar del enorme beneficio que proporcionan al hombre controlando las poblaciones de especies que ocasionan daños sanitarios o económicos.
Además, Eduardo y Martin Laurito se acercaron desde el Vivero Los Tilos para liberar dos jilgueros (Carduelis carduelis), un “Corbatita” (Sporophila caerulescens) y un cardenal rojo (Athene cunicularia). Minetras que el cardenal fue capturado recientemente en Banfield, y el corbatita lo entregó una vecina que conocía de su inquietud en favor de la preservación de estas especies.
Durante los últimos doce meses, se realizaron alrededor de treinta liberaciones de especies que se encontraban en esas condiciones o que fueron rescatadas en estado de abandono o enfermedad. Una diversa población de lagartos overos, comadrejas, cuises, tortugas de tierra, jilgueros, zorzales, horneros y otras ya se encuentran nuevamente en su hábitat natural.
El proceso de liberación depende del tiempo que lleve la especie cautiverio. Entre mayor sea este tiempo, más lento será el proceso de readaptación a su entorno natural, por eso la liberación debe ser supervisada minuciosamente por personal especializado
En esta oportunidad, queremos agradecer el compromiso de los lomeses y habitantes de distritos vecinos que confiaron en el trabajo que se realiza en la Reserva para estas liberaciones, colaborando con nuestros guardaparques en la tarea de salvataje.